Uno de los datos desconocidos por muchos propietarios es que el verano es una época en la que las humedades suelen aparecer. Porque muchos propietarios se van de vacaciones y durante las mismas se produce una rotura o fuga que hace que se cale el suelo y el agua traspase al bloque colindante.
Esta situación es muy poco deseable, ya que el agua producir muchos daños, y las reparaciones pueden alcanzar cantidades realmente altas. Y sobre todo esto es un problema en el caso de que el vecino causante de las filtraciones no tenga seguro, ya que probablemente haya que acudir a la vía judicial para obtener las cantidades gastadas en concepto de reparación.
En el caso de que las humedades vengan por causas del desgaste de la vivienda, o nuestra propia vivienda haya sufrido debido a las consecuencias meteorológicas, tendremos que hacernos cargo por nosotros mismos, y aquí lo más relevante sino tienes seguro es elegir a una empresa con experiencia en humedades.
¿Cuántas veces habré escuchado que unas chapuzas tapó las humedades con pintura, y cobró por ello? La verdad que demasiadas, y el motivo es que por ahorrarnos unos euros aceptamos que un desconocido o un amigo de un amigo entre en nuestra casa, y haga chapuzas.
Esto no ocurre con las empresas profesionales, ya que a ellas les puedes pedir responsabilidad en el caso de que por su actuación la humedad no haya desaparecido. Si quieres tener en tu agenda a una empresa de confianza te recomendamos a Planit, una empresa que presta sus servicios en el área de Levante, y que además de ser especialistas en humedades y desecación tienen una carta de servicios de calidad muy destacable.
A continuación, vamos a ver los pasos que hay que seguir cuando tenemos una humedad. Si bien, el mayor consejo que podemos daros es no tomar el asunto a lo personal, porque puede que de esta manera sea más difícil arreglar las humedades, que es el objetivo.
Los pasos para que las humedades no calen en nosotros
Lo primero que hay que hacer es avisar a nuestro seguro para que nos asesore correctamente. En algunos casos, el seguro cubre esta contingencia y se ocupa de la reparación y sean ellos mismos lo que se ocupen de realizar las reclamaciones oportunas al causante de los daños. También podemos apelar a la cobertura de asesoramiento y defensa jurídica para que el seguro se ocupe de hacer todo lo necesario para arreglar el problema y reclamar daños. ¿No tienes contratada esta cobertura en tu seguro de hogar? Entonces es probable que tengas que poner el caso en manos de un abogado.
Otro paso importante que hay que dar es depurar responsabilidades. ¿Quién es el responsable de la avería? En muchos casos, este tipo de averías son causadas por terrazas que son propiedad de la comunidad pero de uso privado de un vecino, o por problemas en el tejado (también responsabilidad de la comunidad) que causan goteras en un desván de uso privado que a la vez provoca humedades al vecino de abajo.
La falta de mantenimiento es un motivo habitual por el que las aseguradoras se niegan a reparar el daño. No obstante, la naturaleza del daño provocado puede ser interpretado como un problema de responsabilidad civil. Una vez más, podrás utilizar la cobertura de asistencia legal de tu seguro para reclamar tus derechos. En todo caso, si el seguro no cubre al responsable la reparación es su problema. En todo caso, tendrá que pagar él mismo esa reparación.
Ese es su problema, y como tal tendrá que afrontarlo. Es más, cuanto más tarde en hacerlo, mayores serán los daños causados y mayor la reclamación por responsabilizad civil, a la que tendrá que hacer frente el responsable, tanto si tiene un seguro que no le cubre como si no tiene ninguno.
En cualquier caso, es fundamental no llevar a cabo ninguna obra o reparación hasta que no quede claro quién es el responsable y qué debe pagar. Ten en cuenta que no tener seguro no exime a nadie de su responsabilidad civil y, por otra parte, realizar una reparación en tu vivienda sin resolver el problema que causó los daños no te va a servir de mucho. En el caso de que el asunto se demore, podrás incluir en la demanda una indemnización adicional por daños morales.
